Crítica de Cuerpo de Élite de Joaquín Mazón

En Cuerpo de Élite tendremos a los españoles mejor cualificados, para la operación más compleja del mundo: Salvar Madrid.

La premisa a simple vista es divertida, y el tráiler no hace más que azucarar una guerra de tópicos sin contemplaciones. ¿Funciona? A medias. Cuando estrenaron Ocho Apellidos Vascos nos encontramos con una película donde se descubría el País Vasco al resto de españoles, por muy ridículo que suene. Y curiosamente funcionó a la perfección. Formula que intentaron llevar a cabo otra vez con la serie televisiva Allí Abajo. Por desgracia Cuerpo de Élite no consigue emular, principalmente porque abusa de unos tópicos demasiado explotados, aunque consiguen sacar una carcajada.

Hablemos por parte de los actores. En primer lugar se nos presenta al Madrileño, interpretado por Miki Esparbé, un joven agente de movilidad en Madrid , cuyos principal rasgo es el cumplimiento de la ley (a su manera). De los cinco que forman el Cuerpo de Élite es el que menos juego da puesto que los tópicos en ningún momento caen con él. Se podría decir que es un nexo entre los demás protagonistas para desahogar por momentos la avalancha de gags que se producen en varios momentos.

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En segundo lugar tenemos al Mosso d’Esquadra, interpretado por Jordi Sánchez. El cerebro del grupo sin lugar a dudas. El personaje pese a que podría ser blanco de muchas críticas no lo es tanto, está el tópico de tacaño y el apelativo de “catalufo” pero por lo demás pasa bastante desapercibido. Se nota que a Jordi le cuesta quitarse la sombra de Antonio Recio, quizás demasiado larga para un actor que ha tocado techo.

En tercer lugar nos presentan a la Guardia Civil, a la que da vida María León. Los gags aquí principalmente vienen por su región, Andalucia. Aun así se nota que no han querido tirar una piedra para herir, como pudimos ver en Ocho Apellidos Vascos, donde cada comentario era un topicazo que hasta dolía oírlo. Personaje femenino para meter una historia de amor y poco más, y mira que los picoletos dan para bromas… pero no han sabido cogerle el punto al personaje para no desviarlo de la trama amorosa.

En cuarto lugar nos encontramos al Vasco. Un miembro de la Ertzaina y exinfiltrado en la ETA. Aquí las bromas sí que afloran como deben ser. Se nos presenta al vasco como un hombre rudo, fortachón y con las cosas metidas en la frente a más no poder. A que no hay huevos es su lema y quizás su personaje es el más redondo de todos.

Por último tenemos al Legionario, interpretado por Juan Carlos Aduviri. Un ecuatoriano que cree fervientemente que es español, de ahí su apodo “Cuenca”. Junto al Vasco es el que más gags potentes tiene, y el que más sonrisas consigue en la cinta.

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Cuerpo de Élite no es la película española del año, pero si consigue una cosa: entretener. Quizás sea por la duración que no da para el aburrimiento, pero la cinta consigue su objetivo. Aun así como en todas las películas de comedía, la promoción hace mucho daño y sinceramente la mayoría de los buenos gags los habrás podido ver antes de ir al cine.

Por Angelsangui

Sobre el Autor

Alfi

Diseñador e ilustrador, amante del séptimo arte, devorador de Bandas sonoras y de videojuegos, y un fiel servidor al Orden Jedi.