«Witches can be right. Giants can be good. You decide what’s right. You decide what’s good«
Into The Woods se nos presenta como una nueva forma de presentar los clásicos de los Hermanos Grimm. Acompañados de música, Stephen Sondheim y James Lapine nos contaron por primera vez allá por 1986 en el teatro Old Globe de San Diego como las brujas pueden tener razón, los gigantes ser buenos y los príncipes unos malos bichos de mucho cuidado. Con su versión adulta de contar estos cuentos, se metieron los premios Tony (los Oscar del mundo musical) en el bolsillo.
Siendo una gran fan de la obra y tras el exitazo de Los Miserables de la mano de Tom Hooper, imaginad mi ilusión (y miedo) al escuchar la posible adaptación de este teatro tan adulto y con temas tan delicados como la violación y la pedofilia por parte de Disney. Sin embargo he de decir que, manteniendo en mente que han tenido que rebajar muchísimo la dureza de la trama para que sea apta para niños, es una buena película.
Esta empieza con la presentación por parte de un Narrador (presente durante todo el metraje) de todos los personajes al ritmo de la canción que da título a la película, Into The Woods. Nos introducen a Anna Kendrick como Cenicienta, viviendo con las ya conocidas Madrastra (Christine Baranski), y hermanastras (Tammy Blachard y Lucy Punch); seguidos de Daniel Huttlestone como Jack y a James Corden y Emily Blunt interpretando al Panadero y su mujer; todos cantando sobre cuales son sus deseos: Cenicienta quiere ir al festival del príncipe, Jack quiere que su vaca dé leche y el matrimonio de panaderos quiere tener un hijo.
Como bien reza el dicho, hay que tener cuidado con lo que se desea, y como prueba de esto entra en escena Meryl Streep interpretando a la Bruja, quien cuenta al Panadero y su mujer que una maldición pesa sobre ellos y les impide tener hijos, pero ella está dispuesta a ayudar a cambio de una poción que le devuelva su belleza. Dándoles tres noches como plazo, la Bruja les exige cuatro ingredientes para su poción: Una vaca blanca como la leche, una capa roja como la sangre, un pelo amarillo como el maíz y unos zapatos puros como el oro. Podéis imaginar por donde les guía esto.
El resto de la trama se desarrolla entrelazando las historias de todos los personajes, Caperucita Roja (Lilla Crawford) yendo a la panadería a coger algunos dulces para su abuela, Rapunzel (Mackenzie Mauzy) en una torre en medio del bosque, unos príncipes en busca de sus princesas (Chris Pine y Billy Magnussen)… Los personajes de los cuentos de manual imprescindibles.
A nivel técnico, creo que mantener a James Lapine y Stephen Sondheim en el proyecto con Rob Marshall como director y a Dion Beebe al cargo de la cinematografía (quienes ya trabajaron juntos en Chicago) ha sido todo un acierto. La estética, fotografía y la sensibilidad con la que se trata a los personajes (no olvidemos que tengo cierto cariño especial a esta obra) es más que suficiente para satisfacer al espectador medio, con ciertos guiños hacia los habituales del teatro como el uso de las cámaras (toma nota para tu próxima adaptación, Hooper) y la escenografía.
La película equilibra muy bien el humor, ácido y negro en muchas ocasiones, el drama y las canciones entrelazándose perfectamente con lo que ocurre en pantalla, sin que queden como un pegote a la historia.
No lo olvides: Las interpretaciones, todos dentro de su linea de más o menos expresión facial (ejem Anna ejem), lo cierto es que nos ofrecen una buena diversidad de voces y actuación que se disfruta. Mención especial a las inmejorables Meryl Streep y Emily Blunt, al graciosísimo duelo de penurias entre ambos príncipes en Agony y al pequeño papel de Johnny Depp como El Lobo Feroz. Y el juego de romper la cuarta pared en numerosas ocasiones.
Olvídalo: Los recortes respecto a la obra, hacen que el cambio de ritmo de la película cuando nos acercamos a su tercera parte resulte realmente brusco. Pese a que la mayoría estaban escritos en el guión, fueron eliminados en la sala de montaje. Podéis encontrar una lista completa de estos en la Wikipedia de la película.
Paula B.