El director Peter Berg (Hancock) vuelve después de dirigir en el 2012 “Battleship”, con esta cinta de bajo presupuesto (nada tiene que ver con Battleship), esta historia inspirada en la novela escrita por Marcus Luttrell, que nos cuenta sus experiencias y vivencias como miembro NAVY SEAL durante lo ocurrido a su pelotón durante una misión en la que tenían que eliminar a un terrorista talibán.
Seguramente sin ver la película se podría decir que estamos ante una cinta patriótica típica americanada para los americanos, pero la verdad es que no es para nada así, hasta tal punto que llega a sorprendernos. El comienzo de esta película esta contada como si fuera un documental, y nos enseña el duro entrenamiento al que están sometidos estos SEALS, hasta el punto en el que vemos que ese sufrimiento une a esos soldados casi como si compartieran sus vidas, así que los SEALS son más que hermanos. Y así viven el día a día conviviendo como una familia, protegiéndose unos a otros en medio del conflicto de Afganistán mientras esperan terminar su misión y regresa a su hogar junto a sus familias.
Así que el resultado de esta película es muy notable, aunque sólo con el título de este nos desvela el final de la película, y los primeros 5 minutos del comienzo son parte del desenlace, sólo hay que ver que es lo que ocurre durante la historia para terminar así.
Hay que reconocer que Berg ha sabido como rodar la acción en medio de ese paraje, ya que lo visto en esas escenas sirven para entender lo que los protagonistas de esta historia aguantaron a pesar de ser acribillados. Llegando a trasmitir al espectador el dolor de estos en esas caídas durante la huida y lo más doloroso, el impacto de una bala. Ya que el director a sabido destacar y realzar esa tensión desde el primer contacto de los talibanes al estallido de ese feroz e intenso tiroteo. Pero hasta llegar a todo esto, el núcleo principal de esta historia, pasara cerca de una hora, así que mientras al principio conoceremos a todos los personajes integrantes de esta historia, conociendo su historia, su familia, cogiéndoles un encariñamiento a estos personajes, sabiendo de sobra que tarde o temprano acabaran muertos.
Otro de los momentos emotivos de esta película y notable al final de la cinta es que, después de enseñarnos las imágenes de todos los SEALS de esa misión, se cuenta que el poblado de la tribu de los pashtunes tiene un código de honor conocido como “código Pashtunwalli” esta basado en diferentes principios de honor, y por eso este poblado se muestran en contra de los talibanes, ya que se ven obligados a dar hospitalidad y a ayudar al enemigo con independencia raza, religión o la nacionalidad, si ha sido abatido, se le concede ester derecho. Así que este momento queda bien reflejado durante la historia cuando el protagonista se ve perplejo al ser ayudado y apoyado por estos, a pesar de ser precavido y se explica el porqué al final.
Recordar que esta cinta en un completo homenaje a esos hombres, que dieron su vida en una misión, y nos muestran ese sentimiento de hermandad y de unidad que forjaron entre ellos.
Así que para finalizar estamos ante una cinta barata, y a pesar de su título, una muy notable cinta de acción y en cuanto a las interpretaciones del grupo, destacar la actuación de Mark Walhberg, y muy bien acompañado de su pelotón, también muy notable la actuación de Ben Foster, Taylor Kitsch e Emile Hirsch, ante la presión y la angustia con la que tuvieron que combatir en ese ambiente tan hostil.