The Last of Us es uno de los videojuegos (exclusivo para PS3) más excelente que nos trajo el 2013, una historia situada en un mundo postapocalíptico que mezcla a la perfección el drama, la acción, la supervivencia y una sensacional trama que atrapa de principio a fin. Cinematográficamente hablando, se puede hablar de similitudes con 28 días después y La Carretera con total libertad. Quizá se convierta en el videojuego hecho película más notable, porque ha habido más de una decepción en este campo (quizá si la adaptación de otro juego maravilloso llamado Uncharted -casualmente de la misma empresa, Naughty Dog- llega a hacerse realidad, sea otra excepción de la que se pueda llegar a hablar bien).
Centrándonos ya en lo que será la película, Sam Raimi, a través de su compañía Ghost House, producirá la cinta junto a Screen Gems, y estará escrita por el director creativo y guionista del juego, Neil Druckman, confirmando así las posibilidades de la película.
Los co-presidentes de Naughty Dog (empresa que desarrolló el juego) Evan Wells y Christopher Balestra, serán los arquitectos creativos de la película. Así se asientan las hipotéticas bases de que la adaptación cobra mucha fuerza y sentido. Cimentándose el equipo creativo, ya sólo falta empezar a buscar candidatos en dirección y protagonistas, porque las esperanzas en esta película están llegando a ser muy altas. Otras adaptaciones como las de Bioshock, Gears of War y God of War, entre algunas muchas otras, se han quedado estancadas, y la última gran adaptación realizada fue Prince of Persia, que a pesar de ser una película entretenida que se puede digerir, fue muy criticada por sus escasas similitudes con la historia original (pudo haber sido algo muy grande y con posibilidades de secuelas…). Joel y Ellie se aventuran a la gran pantalla, y por lo que sabemos hasta la fecha, podrían llegar a tener mucho éxito en ella.