Esta supone la opera prima de Wally Pfister (el director de fotografía habitual del director Christopher Nolan en Memento, Origen, entre otras), en la que Transcendence nos cuenta la historia del Dr. Will Caster, uno de los investigadores más importantes en el campo de la I.A. (Inteligencia Artificial) de todo el mundo. Johnny Deep, es el protagonista de encarnar a Caster en esta fábula autopia tecnológica, con una interesante y notable premisa pero que a medida que va avanzando la cinta, va perdiendo fuerza o el interés.
Y sus estudios o teorías le llevan a poder crear un ordenador perfecto en el que se puedan acumular o archivar todo el conocimiento humano y también sus emociones, temores y miedos incluidos, como una máquina todopoderosa capaz de sentir y desentrañar todos los secretos de nuestra propia existencia.
Así que la búsqueda de esta Inteligencia Artificial lo convierte en el objetivo de un grupo de tecnófobos, convertidos en unos terroristas anti-tecnológicos que lo acusan de querer convertirlo en un nuevo Dios. Y después de una de sus conferencias Will sufre su ataque y es condenado a una muerte segura, sin saberlo. Entonces es cuando sus colegas de investigación; su esposa, Evelyn (Rebecca Hall) y su mejor amigo Max (Paul Bettany) trataran de mantenerlo con vida, y es cuando con los avances de otras investigaciones, detenidas por causa de este grupo anti-terrorista podrían salvar a Will. Así que trasladaran todos los recuerdos, razonamientos y pensamientos de la mente de Will en un superordenador con el fin de mantener su mente viva, trascendiendo su mente física al de una I.A. (Inteligencia Artificial).
Trascendida la mente de Will no conocerá límites, controlando todo lo virtual y siendo un ser omnipresente con el fin de estar junto a Evelyn, angustiada y desesperada por salvar a su marido, entonces es cuando Max comenzará a cuestionar su “trascendencia” y se planteara si no supondrá un problema soltar a Will en la red mundial (Internet) ya que desconocen lo que podría suceder o como afectarle.
Así que bajo una trama demasiado convencional para el asunto que trata esta cinta, Pfister y su guionista Jack Paglen (también es su debut) encadenan una nueva visión de la ciencia-ficción, de lo que estamos acostumbrados, donde ya no es hasta donde es capaz de llevarnos los avances de la tecnología y de sus “posibles” peligros, sino nos trasladan a la posibilidad de que la materia humana pueda convertirse en otro ser, tecnológico conservando la mente humana (sentimientos, memoria, razón de un alma) dentro de un ordenador y no como un ciborg, llevados o rozando el delirio y la esquizofrenia. Y de como poder combatir todas estas teorías o ideas. Puede que en Transcendence haya muchas más ideas que vayan más allá de las similitudes que esta cinta nos presenta con el maestro de la ciencia ficción y de los relatos fantásticos de Phillip K. Dick o el mismo Isaac Asimov (creador de las leyes de la robótica entre muchas otras cosas) pero más recientemente a otros proyectos más televisivos como Dollhouse o Black Mirror.
Esta película trata de plantearnos una idea bastante interesante, pero Transcendence va perdiendo fuera o gancho a medida que la película va avanzando, enmarañándose con la idea de la transcendencia y con la idea de ir cada vez a más en la historia. Ya que la trama cada vez pretende ser de lo más transcendente posible, de forma tan metafísica y omnipresente, consiguiendo que el interés del espectador caiga en la desgana, ya que entre todo estas aires de expansión y (buena) intención de Will se encuentra una desfigurada historia de amor, entre Will (máquina) y Evelyn (humano)
La banda sonora de esta corre a cargo de Mychael Danna (como ya comentamos en su entrada) es lo único que cabría a destacar, ya que el elenco de esta a pesar de contar con un gran peso interpretativo; desde el propio Johnny Depp, Rebecca Hall, Paul Bettany, Kate Mara, Morgan Freeman, hasta Cillian Murphy parecen no estar a la altura, de forma muy desaprovechando y podría haber dado más de sí, o al menos esa es mi interpretación, con lo que podría finalizar que esta cinta intenta ser algo muy profunda y termina siendo una cinta totalmente in-Transcendence.
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