Odio De La Nación
En inglés «Hated in the Nation«. Es el último episodio de la tercera temporada de Black Mirror. Está escrito por el creador de la serie, Charlie Brooker y dirigido por James Hawes. Protagonizado por Kelly Macdonald (No Country for Old Men, Boardwalk Empire) y por Faye Marshall (Juego de Tronos) y Benedict Wong (Marte, Doctor Strange).
La sinopsis sería la siguiente: Tras la muerte inesperada y en circunstancias misteriosas de la periodista Jo Powers (Elizabeth Berrington) la persona más odiada de todo el Reino Unido, se le encarga el trabajo de investigación a la inspectora jefe Karin Park (Macdonald) y a su nueva ayudante Blue (Marshall) recientemente transferida desde la unidad cibernética dentro del departamento forense de la policía. Descubren más tarde que unas abejas robot tendrán un papel crucial en la historia.
Paro aquí porque no quiero desvelaros nada. Como siempre, los que ya hayáis visto el episodio, continuad conmigo. Aquellos que aún no lo han hecho, os espero luego.
Atención: Spoilers de Black Mirror
Para todos aquellos que os quedasteis con ganas de tener una pareja de mujeres en True Detective, éste capítulo es lo más cerca que vais a estar. Por supuesto, como no puede faltar en Black Mirror el malo en este caso será un experto en tecnología y la misma, su arma homicida. En fin, comparaciones aparte, me ha parecido un correcto final para una estupenda tercera temporada de Black Mirror.
Dejando a parte la trama, que en algunos momento era bastante previsible, me gustaría destacar el sustrato moral que Black Mirror ha dejado para el final. En este capítulo se ha instaurado un sistema de ajusticiamiento popular. De esta forma aquel individuo elegido por la sociedad será asesinado cada día, lo único que tienen que hacer es tuitear una foto de la persona que desean ver muerta y usar el hashtag “#muertea” más el nombre de esta persona.
Por decir un fallo sería que la causa de instalación de este sistema de ajusticiamiento es la venganza por amor. Sí, es un motivo fuerte, pero en mi opinión hubiera sido más épico que el origen de la rabia del que maquinó ese sistema, tuviera motivos más profundos como sería dar una lección a la sociedad.
Uno de los momento más fuertes es cuando encuentran una lista con el nombre de todos aquellos que habían usado el hashtag y momentos más tarde, anuncian que van a morir todos. Antes de que se descubriera el fatídico destino, yo pensaba que esta lista era para llevar a juicio a todas estas personas, y no, finalmente era para que acabaran como sus víctimas. Quizás hubiera estado mejor que Black Mirror hubiera el juicio como medio de búsqueda de justicia, en mi opinión.
Por otro lado se habla de la selección natural: cómo unas abejas robot que vienen a ocupar el lugar que en el ecosistema venía a ocupar un tipo de abejas extintas se utilizan para el bien del medio ambiente, pero es un arma de doble filo: puesto que son utilizadas por el Gobierno para espiar a los individuos de la sociedad. Además, es el arma homicida en nuestra historia.
Volviendo a True Detective, sigue el paralelismo: una de las protagonistas desaparece del mapa y finalmente, por sus medios busca su propia forma de justicia. Salvando las distancias, tenéis que admitir que algo sí se parece.
Muy buena la actuación de las dos protagonistas. Especialmente a Kelly Macdonald, muy creíble en el juicio y en general en el episodio. Me ha costado mucho reconocer a Faye Marshall, que interpretó en Juego de Tronos a The Waif.
En fin, con esta review doy por terminada la tercera temporada de Black Mirror. Espero que os haya gustado tanto para mí y me complace anunciaros que Netflix ha encargado una cuarta entrega de esta genial serie, pero de momento, no se conocen muchos datos al respecto. Sí se sabe que Jodie Foster dirigirá un episodio en la cuarta temporada, protagonizado por Rosemary DeWitt (United States of Tara, Rachel Getting Married).
Pronto espero tener preparado un ranking con los mejores episodios de esta tercera entrega de Black Mirror.
Atentamente,
Carmen Peris