El danés Lars Von Trier es uno de los directores más controvertidos, sus trabajos siempre han llamado la atención para bien o para mal y ahora vuelve a las pantallas con su última película, “Melancolía”.
Siempre en el centro del huracán y de las polémicas, Lars Von Trier se ha convertido a la vez en uno de los personajes más detestado y respetado, pues no hay más que recordar el revuelo que originó en Cannes en 2009 con su película “Antichrist” (2008), que fue ampliamente rechazada por el público y la critica presentes en el Festival. La situación se agravó aún más tras las polémicas declaraciones, sacadas de contexto, que realizó en una rueda de prensa. Pero dos años después, ya sofocada la situación, volvía al mismo Festival de Cannes para presentar el trabajo que aquí nos ocupa, y a pesar de los halagos que recibió por la película, nuevamente se despertaron los rencores ante las declaraciones que hizo el cineasta sobre el sentimiento de simpatía que le suscitaba Hitler. Después de semejante afirmación fue vetado por el certamen.
Si su penúltima película, “Antichrist” nacía de la depresión del realizador, “Melancolía” lo hace de una relación epistolar mantenida con la actriz Penélope Cruz, que quería trabajar con él. Por sus cartas podemos saber, que Penélope le sugirió la obra del dramaturgo francés Jean Genet, titulada “Las criadas” y en las que dos criadas acaban con la vida de su señora. Pero el cineasta le dejó claro que el no rodaba nada si no salía de él mismo, «Le dije que no rodaba nada que no naciera de mí, pero intenté escribir algo para ella. De hecho, las dos criadas se convirtieron en dos hermanas», nos cuenta el director.
Otra de las influencias que denota la película es la del compositor Richard Wagner, de hecho podemos escuchar el preludio de la ópera “Tristán e Isolda”.
El titulo de “Melancolía” refleja lo que el psicoanalista del director le dijo en alguna ocasión, «Mi psicoanalista me dijo que normalmente los melancólicos son más sensatos que la gente normal cuando se encuentran en una situación desastrosa, en parte porque pueden decir: “Ya te lo había dicho”. Y también porque no tienen nada que perder».
Sin embargo, a pesar del apabullante éxito de la película, ampliamente elogiada por la crítica, su director no está del todo de acuerdo con la valoración. En un dossier de prensa se pudo leer la opinión al respecto de Lars Von Trier: «Fue como despertarse de un sueño. Mi productora me mostró un boceto para el cartel. “¿Qué es esto?”, pregunté. “Es la película que has rodado”, contestó. “No me digas eso”, exclamé, atónito. Veo los tráileres, las fotos… todo me parece una mierda. Me siento fatal (…) Es pura nata montada, ¡una película de mujeres! Estoy dispuesto a rechazar la película como si fuera un órgano equivocado recién trasplantado».
Quien sabe es la verdad o mera publicidad, pero de alabar con creces la que consideraba su gran obra a vilipendiarla así hay un gran trecho.
Su trabajo mantiene algunas similitudes con la película de Abel Ferrara “4:44 Last day on Earth” presentada en el Festival de Sitges de este año, donde se refleja muy bien ese Apocalipsis intimista que envuelve la película de Von Trier.
El director nos aproxima al inminente fin del mundo durante la celebración de la boda de los protagonistas, Justine (Kirsten Dunst) y Michael (Alexander Skarsgard). Una suntuosa boda que está teniendo lugar en casa de la hermana de la novia (Charlotte Gainsbourg) y de su marido (Kiefer Sutherland). Lo que nadie sabe es que el planeta Melancolía se aproxima a la Tierra para destruirla, y en medio de esta situación la tensión entre los personajes protagonistas, concretamente entre las hermanas, se va poniendo de manifiesto rompiendo con la imagen idílica de la boda.
A los actores principales les acompañan en el reparto actores como el veterano John Hurt (“El hombre elefante”), Stellan Skarsgard (“Bailar en la oscuridad”) y Udo Kier (“Rompiendo las olas”).
Tras el éxito de la película en Cannes, que le valió a la actriz Kirsten Dunst el premio a la Mejor Actriz, un presupuesto de 7,4 millones de dólares y el tradicional revuelo que ocasiona Lars Von Trier allá donde va, llega esta preciosa película a las salas de cine este viernes.