Se acercan las Navidades y con ellas toda una serie de películas impregnadas del espíritu de estas fiestas, pensadas para que disfrute toda la familia. Hoy, 7 de diciembre, llega a las salas de cine “Arthur Christmas: Operación Regalo”, una co-producción británico-estadounidense, que corre a cargo de Aardman Animations, que en 2007 rompía su relación con DreamWorks y apostaba por colaborar más de cerca con Sony Pictures, y el resultado después de estos cuatro años ha sido esta divertida comedia de animación navideña, dirigida por Sarah Smith. Una apuesta segura, que según todos los pronósticos va a ser el éxito de estas navidades, y que grandes y pequeños deberían ver si quieren pasar un buen rato.
Un film que ha arriesgado al trasladar la idea de familia desorganizada al ámbito de Santa Claus y el negocio que este ostenta. Por eso la película no se centra solo en la habitual figura protagonista de Santa Claus, sino en la de su hijo mayor Steve, que se encarga de llevar la empresa al día y que está destinado a ser el sucesor de Santa; pero también la del pequeño Arthur, que por lo visto tiene problemas de adaptación dentro de esta cadena de producción familiar. Aunque el joven sea un poco torpe, tiene muy buenas intenciones y un verdadero espíritu navideño; además ha sido doblado por James McAvoy, quien ha captado muy bien la personalidad de este: «Arthur cree en la Navidad y no sólo porque forme parte de los negocios de la familia. «Cree a ciegas en la causa. No hay nadie en el mundo que se preocupe más por la Navidad que Arthur».
“Arthur Christmas” nos traslada a la base secreta del Polo Norte, donde la empresa familiar de Santa trabaja muy duro durante todo el año para poder cumplir con la entrega de todos los regalos que los niños le han pedido. Un ejército de elfos es el encargado de ayudar a Santa a repartir los regalos en la que es la noche más dura del año, pero al duro trabajo de Santa Claus se le suma la pérdida de un regalo por parte de su joven hijo Arthur; así que en el último momento, Santa se embarca en un trepidante misión a contrarreloj para poder cumplir con el sueño de un niño.
Sin duda, uno de los aspectos que más ha llamado la atención ha sido el trabajo del equipo de producción, que no ha parado hasta hacer más realistas los parámetros de la noche de Navidad y el reparto de regalos. Para conseguirlo, se calcularon el recorrido, la velocidad y las infraestructuras del propio Santa para ver cuánto se tardaría en hacer la entrega en todo el planeta: «Comienzas a pensar que tendría que empezar por el extremo sur de Nueva Zelanda e ir zigzagueando alrededor del mundo para hacerlo en doce horas. Tuvimos una discusión sobre las zonas horarias y sobre si Santa Claus podría volar durante el día y regresar de noche. La idea de que los elfos tengan exactamente 18.14 segundos por casa se basaba en los cálculos que hicimos», esta la explicación que daba el co-guionista Peter Baynham.
A este realismo y a esta apasionante historia, hay que añadirle un nutrido y popular surtido de voces, que en la versión original está compuesto por James McAvoy (“La conspiración”), Hugh Laurie (serie “House”), Jim Broadbent (saga “Harry Potter”), Bill Nighy (“Radio encubierta”), Imelda Staunton (saga “Harry Potter”), Eva Longoria (serie” Mujeres Desesperadas”) o Laura Linney (“Crónica de un engaño”).