Los secretos de la película de Malas Madres (Bad Moms)

Delgaducha, encariñada, tigresa…; siempre hay una madre que se ajusta a uno de esos perfiles y a otros tantos. La cuestión es; ¿Es demasiado pedir que convivamos en paz? Estamos en un punto en el que nos encontramos saturados de tanta información: apps muy modernas, blogs, consejos expertos, comentarios lúcidos… Pero nada de eso soluciona El Gran Problema al que se enfrentan todas las madres: cómo lograr que en las miserables 24 horas de un día nuestra familia sobreviva, alimentándose y que sea funcional, y todo eso sin perder la sonrisa. ¿Hay alguna app o hashtag que tengan la clave? ¿Podemos culpar a las pobres madres que se vuelven locas ante todo esto? #No #NoSePuede

¿De que va Malas Madres?

Esta es la nueva comedia de los guionistas de Resacón en Las Vegas, en la que conoceremos a Amy Mitchell que tiene una vida perfecta: casada, tiene unos hijos aplicados, una preciosa casa y una carrera. Sin embargo, está saturada de trabajo, de tareas y exhausta, siempre a punto de explotar. Agotada, se juntará con otras dos madres estresadas, Kiki y Carla, para liberarse de las responsabilidades convencionales, y así se embarcan en un atracón salvaje de libertad anti-mamás, diversión y autocomplacencia, chocando frontalmente con la Reina de la Asociación de Padres de Alumnos Bee Gwendolyn y su clan de madres devotas y perfectas, Vicky y Stacy.

Presentación

Esta película es la nueva comedia escrita y dirigida por Jon Lucas y Scott Moore, y transcurre en un exclusivo barrio de Chicago, donde la supermama más chic, Gwendolyn James (Applegate) hace de policía del comportamiento adecuado.

Y el resto de madres saben muy bien que no pueden meterse con ella, y Amy Mitchell desde luego no tenía esa intención: la vida ya era suficientemente dura para ella. Pero cuando esto ocurre se declara la guerra entre el bien y el mal, a punto de elegir el presidente de la Asociación de Padres de Alumnos en la idílica Escuela William McKinley. Sí, hay bajas… Pero este es el precio del progreso,y es parte del complicado día de una madre.

¿Cómo surge esta historia? 

¿Cómo se les ocurrió a los guionistas de la mejor peli de tíos como lo es Resacón en Las Vegas, ponerse a hacer un homenaje a las mamas? Y como no, no apta para todos los públicos.

Cuando lees el guión seguro que piensas que lo ha escrito una mujer, pero cuando hablas con Jon y con Scott te das cuenta de que es un homenaje a sus mujeres”, destaca la actriz Mila Kunis, madre también en la vida real. Como las seis actrices principales de la película son madres. La actriz detalla que “Les dije que me gustaría interpretar cualquiera de esos papeles. Yo quería hacer algo en lo que me viese reflejada. La idea de grupo también me atraía: no quería estar sola, y quería hacer algo divertido”.

Kunis interpreta a la protagonista de Malas Madres, Amy Mitchell, una madre trabajadora con miles de obligaciones y preocupaciones que no le dejan tiempo para hacer amigos, y mucho menos para divertirse. Estando demasiado ocupada como para darse cuenta de lo que se está perdiendo.

En cuanto te conviertes en madre te olvidas que eres una chica y que necesitas a tus amigas”, añade Kristen Bell, “Parte de la belleza de esta película es que trata de estas madres que redescubren el significado de la amistad”.

La esencia de las Malas Madres

Los directores de Malas Madres, llevan colaborando juntos durante un largo tiempo y lo más complicado, siendo amigos desde hace más de 15 años, en este tiempo se han convertido también en padres, y en directores.

Moore explica que “Nosotros escribimos desde casa, con lo que vemos a nuestras mujeres romperse el lomo cada día. Siempre van corriendo…ahí hay mucho drama, y a la vez es terreno fértil para la comedia”.

Lucas explica que “Como padres, somos apéndices-de-mamá. Es parecido, pero en el mundo de las madres hay mucha presión que no existe en el de los padres. Queríamos sumergirnos en esas aguas turbulentas”.

Jada Pinkett Smith, interpreta a Stacy, una de las secuaces del séquito de Gwendolyn, y describe esa división entre madres y padres añadiendo que: “Ellos no se mojan tanto como nosotras, ellos pueden sentarse y abstraerse contemplando las escenitas desde otro punto de vista. Nosotras sólo podemos ver lo que tenemos de frente, mientras que ello miran y dicen: ¡qué divertido!”.

Ambos directores se hicieron todo unos expertos en el asunto e investigaron organizando cenas con varias madres, mucho vino e historias varias desde las trincheras Según Lucas: “Las madres reales no hablan como se ve en la típica película para madres. Todo es mucho más interesante, divertido, y más picante. Y sí, ¡hay conflicto!”.

El director cree que las madres tienen una fachada que mantener y “De eso va la película. Ya que muchas madres piensan que tienen que fingir que todo va bien, que todo es más simple y así son felices. Pero es más complicado en realidad, y con un vaso de Chardonnay sale todo a flote… y así empezamos a escribir”.

Ambos guionistas se dieron cuenta de que las madres se necesitan las unas a las otras. Lucas observó en ese tiempo, “Alguna dirá: yo pensaba que mi hijo, era el único que hacía eso. Y en realidad hay mucha más gente que pasa por lo mismo, pero no hablan de ello. Afortunadamente esta película romperá algunos de esos tabúes”.

Annie Mumolo interpreta a Vicky Latrobe, una mamá del grupo altivas: “Jon y Scott tocan temas muy profundos. Escribir sobre madres y sobre como ser madre, la línea es muy delgada. Es una de las primeras cosas que he leído con verdadera repercusión emocional y con personajes con los que claramente te identificas. Siendo atrevido y divertido, y a la vez irreverente, lo que te mantiene en vilo”.

Christina Applegate aprecia especialmente la rara oportunidad que Malas Madres les ha ofrecido a las actrices, según explica la propia actriz “El guión me atrajo porque este era muy auténtico: una versión de la realidad de lo más valiente y desnuda. Y respecto a mi personaje, Carla, creo que es uno de los mejores diálogos que he visto interpretar a una mujer en el cine”.

Así que las mujeres de Lucas y de Moore fueron las primeras en leer el guión y según el propio Moore: “Todo lo que se nota que es auténtico es porque lo escribimos a partir de sus historias reales. Nos dieron notas y nos sugirieron bromas, y a veces nos decían que una madre real no diría eso o lo otro. Cuando tuvimos al reparto, también las escuchamos a ellas”.

Kathryn Hahn es Carla en la película, una solterona tremenda, y cuando leyó el guión su primera reacción fue sentir admiración por la mujer de Moore. Ya que según cuenta la actriz: “Scott es uno de los padres de la escuela de mis hijos. Así que cuando leí el guión, vi a su mujer Mary de otra manera, ella es maravillosa. Y me encanta eso de nuestros directores: les fascinamos”. Lucas y Moore, no pusieron la condición de que las actrices principales fueran madres, pero ocurrió ser así.

BAD MOMS

Moore añade que: “Cuando hablamos con el reparto sobre el guión, en seguida nos dimos cuenta de que las que eran madres conectaban con el material de una manera totalmente diferente e incluso, ponían las cartas sobre la mesa. Si alguien decía: “¿Metemos esto que le pasó a mi hijo?”, nosotros le respondíamos: “Cuanto más raro mejor”. Aunque también solíamos escuchar: “¡Aquí tenéis que apretar más las tuercas! ¡Nosotras nos volvemos incluso muchísimo más locas que ésas!”

Esa actitud materna les daba a las actrices cierta ventaja, según Lucas: “Lo primero que cualquier madre te va a contar nunca va de darle un abrazo a su niño. Porqué te contará que: su hijo se ha cargado su casa. Una madre, tiene un cierto tono y mordacidad que en seguida reconoces. Las que no son madres tienen una idea mucho más dulce sobre lo que significa la maternidad y hablan más tiernamente de los niños”.

David Walton, que interpreta al marido de Amy suele abusar de su webcam, pero en la vida real es más empático: “En general existe mucha confusión y falta de apoyo respecto a la lucha de las madres modernas. Y creo que esta película va de eso. Es una comedia picante sobre la familia… con algunas mujeres guapísimas”.

Los grupos de Malas Madres

La escuela pública ficticia donde transcurre Malas Madres presume de un diverso cuerpo de estudiantes, así como de un diverso grupo de madres.

McKinley se dividen en grupos, desde el de las madres tigresas hasta el de las madres apegadas, pasando por las madres obsesionadas por la comida orgánica y las madres perfeccionistas.

Pero aún así algunas madres no tienen pandilla, ninguna invita a un café a la solitaria y casera Kiki, con sus crocs y sus hijos conflictivos. Por no hablar de la madre soltera, Carla con su apetito desenfrenado y luego esta Amy, la exhausta madre trabajadora, es tolerable a ojos de sus pares, pero la relación es ya muy tensa con todas ellas. La actriz Mila Kunis se compadece de Amy: “Tuvo un bebé a los 19 y otro a los 20, y desde entonces se las ha visto muy canutas para sacar la familia adelante. Así que todos nos sentimos identificados de alguna manera.”

Pero en cuanto se declaran “malas madres”, Amy, Kiki y Carla pierden el miedo a ser encasilladas por las otras madres. A Carla eso nunca le importó, y eso le confiere una importancia vital en la pandilla. “Es el pegamento que nos mantiene unidas”, añade Kunis. “Mi personaje no sabe bien cuál es su lugar en el mundo. Kiki es tranquila y tímida… y ver a Kristen Bell, una persona fuerte y luchadora, interpretando a una sumisa, resulta muy cómico. ¿Pero Carla? Ella es muy ruidosa y sorprendente y coge la vida por las pelotas”.

Con lo que para los personajes de Kiki y Carla que son abiertamente cómicos, los directores escogieron a actrices con mucho talento para dar vida a esos personajes. Amy es también muy cómica, pero su historia es más compleja.

Sobre estos personajes Lucas añade que. “Amy tiene que ser divertida, pero también ser la línea conductora emocionalmente hablando para el público. E interpretar el término medio de la película es complicado, nos gustaba Mila para este papel porque puede llevar ese peso emocional, como ya vimos en Cisne Negro, es genial en la comedia. Es una actriz de peso, pero a la vez ligera, con una presencia muy natural y muy real”.

Elecciones del AMPA 

Gwendolyn James, es la eterna presidenta del AMPA y siempre mirando por encima del hombro a las malas madres está. Con un carácter de hierro es muy familiar a todo el equipo de la película.

Lucas añade sobre este personaje que: “En cualquier escuela, en cualquier cultura y de cualquier trasfondo socioeconómico hay una Gwendolyn. Así que podemos imaginar que alguien como ella trabajó en Wall Street o en algún otro trabajo de alto rendimiento, hasta que un día lo dejó y dedicó todas sus fuerzas a la maternidad”.

En cambio, Moore defiende la motivación de este personaje, aunque no sus métodos: “Desde su punto de vista, ella lo hace todo por los niños. Lo que pasa es que hace un mil por ciento más de lo necesario, convirtiéndolo en una competición a ver quién es la mejor madre”. La actriz Christina Applegate, que da vida a este personaje, la impresionó mucho, ya que: “No es que nunca haya conocido a alguien tan horrible, al contrario, me he cruzado con varias Gwendolyns en mis años como madre. Y es que Gwendolyn hará todo lo que pueda para conseguir lo que quiere. Ya que no está acostumbrada a que las ovejas le desafíen, y le mata cuando ve que las madres sólo quieren que las acepten aunque NO sean perfectas”.

Jornadas de Educación Sexual para Malas Madres

Y es que cuando se trata de que Amy se ponga algo sexy para salir, la cosa se convierte en un momento peculiar de risas y confidencias. Bell nos recuerda que: “Como adolescentes, llegamos a su casa y empezamos a sacar cosas del armario, casi nada ponible. Pero tratamos de arreglarla y finalmente conseguimos que se quite su sujetador horrible color carne de maternidad”.

Ese momento es una de las escenas favoritas de Malas Madres para Kunis, ya que se convirtió en: “La escena con la que más nos reímos, porque hablamos de cómo sería acostarse con un hombre no circuncidado. Porqué mi personaje nunca ha visto a uno porque sólo ha estado con su marido”.

Otro de los momentos más recordados es cuando visitan, Amy y de Mike a la Dra. Karl, su consejera matrimonial, la que está interpretada por Wanda Sykes. Walton recuerda que: “Wanda es una de esas personas que todo lo que diga te hace reír”. Así que “Mila y yo no podíamos evitarlo. Lloraba de la risa y me hacia sentir como un principiante”.

Sykes, es una conocida cómica y monologuista y además es una guionista ganadora de un Emmy, desvía la atención al respecto diciendo que: “Eso es lo mejor, cuando nos desternillamos los unos de los otros” es cuando “sabes que hay algo bueno. Mila y David son muy graciosos juntos”. Sobre el tema de la perfección añade Sykes, a modo de la Dra. Karl, que nos olvidemos, ya que “Te volverás loca y volverás a tu hijo aún más loco”.

Con lo que después de tirar de casa a Mike, Amy tratará de encontrar a un nuevo compañero, ya sea, circuncidado o no. Entre esos candidatos encontramos a Jessie Harkness (Jay Hernández), un padre que del mismo colegio y viudo. Las madres del colegio lo adoran.

Sobre su personaje, Hernández, lo descifra comentado que: “En las pelis de hombres siempre hay una chica a la que le gusta el fútbol, es inteligente, divertida y bebe cerveza. Yo soy la versión masculina de esa fantasía para ellas”.

Algo que confirma Kunis: “Jessie es totalmente lo opuesto de Mike… una buena persona. Y la primera vez que aparece le dice a Amy lo buena madre que es. Para Amy, es el mejor cumplido que me pueden hacer”.

Pero todo esto nos lleva a plantearnos la siguiente cuestión ¿Una madre puede ser una madre increíble? La actriz Mila Kunis cree que sí: Porqué “Una mala madre, según los parámetros de esta película, daría a su hijo comida procesada…No vestiría ropa orgánica y quizá no se ducharía a diario…Vería una hora más de televisión al día y no hablaría tres idiomas. Y a veces tendría que esperar en el cole hasta que su madre fuera a recogerle. Y ya os digo yo con mucho orgullo que mi madre hizo todo eso y sigo viva. Y la quiero mucho… claramente, no pasa nada”.

La noche de diversión en familia

Malas Madres suponer ser la segunda película de Jon Lucas y de Scott Moore juntos, y el primer papel de Kunis en el cine desde que nació su hija. La actriz añade que “Jon y Scott son mantequilla de cacahuete y gelatina, van muy bien juntos. Ya que según la actriz: “Scott quiere conseguir que cada escena sea muy real y Jon quiere hacerla cómica. Y encajan como piezas de un puzle”. Y lo más importante y destacable es que “Les gustan los niños, todos llevábamos a nuestros hijos al set de rodaje y me siento tan afortunada de haber podido formar parte de esta película y haber tenido la oportunidad de rodar con estas cinco mujeres tan brillantes y tan divertidas”.

Desde el primer día hubo un fuerte vinculo según Applegate: “Con seis mujeres, hay gente que quiere saber si pasó algo malo, y la respuesta es no. En toda mi vida jamás había rodado con unas mujeres que tuvieran tanto los pies en la tierra. Todas somos madres, así que nos vemos reflejadas las unas en las otras.” Y lo más importante es que “Nos apoyamos las unas en las otras”.

Lilly Singh, es una actriz de reparto y además es una bloguera, cómica monologuista y también se sintió parte de esta gran familia. “No voy a mentir. Al principio me sentía algo intimidada porque yo vengo del mundo virtual. Pero en cuanto entré en la sala de maquillaje y peluquería, Christina fue encantadora y Mila dijo que había visto mis vídeos.” Con lo que la actriz sintió “Mucho cariño femenino”. Y también masculino.

BAD MOMS

Suzanne Todd explica que según los directores: “Scott y Jon hicieron una película como carta de amor a sus esposas. Cada uno tiene dos hijos, así que también han vivido el otro lado de la experiencia. Es genial trabajar con ellos… Tienen un gran talento, están locos y son muy divertidos, y a la par son muy buena gente, lo cual no es tan frecuente en Hollywood. Así que realmente me gustó mucho trabajar con ellos. Todos los días tenía muchísimas ganas de ir a trabajar”.

Jay Hernández añade al respecto añade que: “Había mucho estrógeno en el ambiente y aun así Jon y Scott fueron muy pacientes. Podrían haber sido los dos gallos del gallinero, pero en vez de eso fue una relación muy simbiótica”. El actor sigue: “Jon y Scott empezaron algo grande con Resacón en Las Vegas…y ahora le dan la vuelta. ¿Mujeres hermosas y graciosas?” y es que “¡No hay nada mejor que eso!”.

Con todo esto cualquier miedo encubierto de que se les “escapara” algo a los directores se fue disuadiendo por la presencia de la productora Suzanne Todd. La actriz Hahn explica: “Para mí, saber que ella estaba por ahí detrás de la cámara con Scott y con Jon me relajaba, como cuando mamá está cerca. Sabes que está cuidando de nosotras y que se dará cuenta de aquello que seguramente no sepas si no eres mujer”.

Los jóvenes interpretes que da vida a los hijos de Amy, tienen 13 años y su propia opinión sobre las madres. Oona Laurence, que interpreta a Jane cree que: “Una madre perfecta es la que apoya a su hijo si quiere ser médico o actor. Y les da siempre a sus hijos la comida más sana y más rica, como hacen mi madre y también Amy”. El joven Emjay Anthony, Dylan en la película, también hace hincapié en la importancia de la comida: “La madre perfecta comprará toneladas de helado, dulces y chuletas para sus hijos”, bromeando al respecto.

Aunque también saben identificar a una mala madre en cuanto la ven, Oona sabe que: “Las malas madres dejan que sus hijos hagan todo lo que les apetezca. Eso hasta cierto punto es bueno, pero también está bien que te guíen”.

Emjay también opina que la sabiduría está en el término medio, ya que: “Si te esfuerzas demasiado como madre, necesitas relajarte. Y si consientes demasiado a tus hijos, no sabrán hacer nada por sí mismos y cuando cumplan 18 años dependerán de todo el mundo”.

En cuanto a sus padres ficticios, a Oona le gustó la elección de David Walton: “No tenía ni idea de que iba a interpretar a nuestro padre hasta que un día apareció en el set de rodaje…Espera: ¿en serio? ¿El de New Girl? ¡Me mola un montón!”.

Pero sobre su personaje, no le mola tanto: Porqué “Nunca ayuda a Amy, y un padre tiene que apechugar, porque las madres tienen demasiado trabajo que hacer”.

Organizando la Logística y el transporte de Malas Madres

Y es que cuando comenzó el rodaje de Malas Madres el 11 de enero en Nueva Orleans, con las desenfadadas escenas hasta que Amy se libera de sus tareas de buena madre. Los siguientes dos meses, el equipo de Malas Madres rodó su completa transición de madre infravalorada a madre desatada en diversas localizaciones por Crescent City. La historia ocurre en primavera, en un barrio de Chicago de cielos azules, verdes prados y árboles floridos. Ya que según los directores “Queríamos unas localizaciones que resultasen muy americanas”.

Pero para ello necesitaban buen tiempo, o al menos que existiera esa posibilidad, y ya que rodaban en invierno, así que tras terminar en Chicago se trasladaron hasta Nueva Orleans. Esa tarea de transformación la describe el productor ejecutivo Mark Kamine: “Teníamos que evitar las palmeras y la arquitectura típica de Nueva Orleans, pero no fue difícil encontrar localizaciones con el estilo del Medio Oeste que tanto querían Jon y Scott. Excepto por un par de tormentas, el tiempo se portó bien”, recuerda Kamine.

Lucas y Moore también querían que la estética de esta película fuera un reflejo del reparto. Kamine detalla que “Las películas cómicas a menudo se ruedan muy planas y con lentes abiertas. Ya sabes: sin preocuparse por ángulos o fondos. Pero Scott y Jon no querían eso: querían conseguir planos interesantes”.

Para toda esta tarea es cuando entra en acción la valiosa labor del director de fotografía, Jim Denault, que ha participado en Dando la nota: aún más alto o Boys Don’t Cry. El productor reconoce que: “Jim ha fotografiado a muchísimas mujeres y eso atrajo a nuestros técnicos y al reparto”. Pero no fueron a los únicos, sus aptitudes fueron muy apreciadas por la diseñadora de producción Marcia Hinds. “Jim es el director de fotografía que me enseñó que por muy pequeño que sea un espacio, siempre puede contener una imagen hermosa”.

Y esas lecciones fueron muy importantes porque Malas Madres no se rodó en inmensos platós, donde se pueden quitar paredes o poner techos y hacer sitio para las cámaras. Todas las escenas fueron rodadas en localizaciones reales, lo cual no supuso ningún problema para Hinds y para Denault. Hinds reconoce que: “Estoy acostumbrado a mirar un espacio e instantáneamente añadir dos metros alrededor para colocar las cámaras. Pero la flexibilidad de Jim hizo que eso no fuera necesario. Las cámaras no tenían por qué estar donde siempre: él y su equipo solucionaron el tema del espacio”.

Y es que el eqipo contó con un amplio espacio para la secuencia inicial, en la que las seis madres junto a cientos de otras dejan a sus hijos en la típica escuela de bloques amarillo.

El resto de localizaciones de Malas Madres incluyen; la casa de Amy, su oficina y la Cooperativa de Café, la casa de Gwendolyn y el supermercado en el que las malas madres se desatan en su primera noche de liberación de obligaciones.

Y es que la Cooperativa de Café es una moderna zona de libre comercio donde Amy trabaja para un Directivo de 24 años. Y para ello producción escogió el moderno entorno del Centro de Arte Contemporáneo de Nueva Orleans que se encuentra en el Distrito de las Artes, para las escenas desternillantes de Amy con sus frustrantes colegas.

El desmadre del supermercado tuvo lugar en el barrio de Gretna, en un supermercado de la cadena local Breaux Mart. La secuencia fue todo un lujo para las actrices, que dieron rienda suelta a la comedia física y a las payasadas de Carla. Kamine recuerda que anteriormente “Ya había rodado en supermercados y no es nada fácil. Porqué no les gusta cerrar el supermercado, pero nosotros necesitábamos disponer de un día entero. Nuestros personajes derramaban productos y los tiran de las estanterías, y hay una escena peligrosa con un guarda de seguridad. Con lo que tuvimos que poner a trabajar en ello a productores de localización durante las vacaciones de Navidad, pero mereció la pena. Jon y Scott quedaron muy contentos con el resultado final”.

Hinds quedó encantado con el resultado y comenta que: “No había una pared que no tuviera marcas nuestras, y lo han dejado todo tal cual”.

Otra de las ambientaciones era la mansión de Gwendolyn, el escenario de una sofisticada velada en pleno momento álgido de la campaña de elecciones de la AMPA. Al buscar esa casa Hinds recuerda que: “Lógicamente queríamos una grande y opulenta, ya que tenían que caber 80 personas en una habitación para la fiesta”.

Al contrario que Amy nos ofrece una fiesta para conseguir el voto esa misma noche que Gwendolyn, ella ofrece es pizza, chupitos y musicaza.

Y no era para menos, ya que lo mejor de la fiesta de Amy fue que los invitados se lo pasaron genial. Y lo mismo hicieron los actores, incluidas las 80 artistas locales que interpretaron a las madres que formaban el AMPA. Esa secuencia se rodó durante dos noches en un salón más bien pequeño, comedor, cocina y jardín trasero en una casa por la parte alta de la ciudad, que fue la base de operaciones del equipo de la película durante siete días.

Hahn nos recuerda que esas noches de fiesta: “Había mucha gente y además llovía, y no había dónde ir entre las tomas, así que se convirtió en una fiesta real. O al menos eso parecía. El baile fue lo mejor, las chicas se lo pasaron en grande. No había jerarquías, la escena era desternillante. Hasta se ve a Kiki haciendo el robot, es fantástico”.

También disfrutó del tiempo que pasó en la caravana de maquillaje: “Kristen estaba dando de mamar, el bebé de Mila correteaba por todas partes y todo el mundo estaba enseñando fotos de bebés. Era un ambiente maravilloso. Los chicos lo tienen más fácil, pero las mujeres son maravillosas”.  

Vistiendo a Malas Madres

Julia Caston es la diseñadora de vestuario de Malas Madres y sabía bien lo que quería en cuanto a la indumentaria de Gwendolyn: “Cuando vas al cole de los niños y ves a la típica madre con su peinado perfecto todos los días, eso irrita”. Con lo que “Nos pusimos a pensar en cómo podría vestir Gwendolyn de forma que al resto de las mujeres les fastidiase un poco. Yo también soy madre y sé que si me pongo algo de un color claro mi hijo lo arruinará. Así que a Gwendolyn la vestimos con colores claros para que estuviese más radiante y angelical, y también rica, suntuosa y glamurosa. Christina colaboró mucho, tenía muchas ganas de pasarlo bien”.

Y es que Gwendolyn no es nada práctica, ni tampoco sus amigas Stacy y Vicky: porqué son ricas. Por otro parte, Amy se viste como una madre trabajadora que trata de dar lo mejor de sí misma. Luego Carla, es un espíritu libre donde los haya, se pondrá cualquier cosa que tenga escote. La actriz que da vida a esta se aventura a añadir sobre su vestuario: “Se necesita todo un ejército para conseguir un canalillo semejante”.

Y finalmente tenemos a Kiki, la madre casera, con sus cuatro hijos incluidos unos bebés gemelos, le da poca importancia a la ropa. Ella viste cómoda con una inofensiva indumentaria holgada color pastel, sobre todo verde menta. Su adorado collar en el que pone “Mamá” le pertenece realmente a ella, ya que se lo hizo su propia hija poco antes de comenzar a rodar la película. Según Bell: “Kiki no viste a la moda, y es una de las razones por las que las madres del AMPA la juzgan y la desprecian. Pero a ella no le molesta, y respecto a su sudadera bordada, no la odio. He logrado hacerme con ella”.

Sobre el Autor

Alfi

Diseñador e ilustrador, amante del séptimo arte, devorador de Bandas sonoras y de videojuegos, y un fiel servidor al Orden Jedi.